Seis de seis
#2 | Copa de la Liga 2024, fecha 2: Seis de seis, Newell’s mira a todos desde lo más alto.
Qué lindo cuando te cierra el orto un tipo al que te la pasás puteando por malo. Es todo ganancia la relación como hincha con un jugador así: te descargás contra él cada vez que insiste en mostrarse torpe y te alegrás si la rompe porque ayuda a que el equipo gane. Sí señores, estoy hablando de Guillermo May, el verdadero Pájaro del plantel actual y no Ignacio Schor. Porque a Schor le dicen Pájaro por un supuesto parecido físico a Caniggia (que consiste en ser rubio y tener pelo largo), pero May es Pájaro porque juega como un clon de Domizi (si fuera por parecido físico, sobre todo por el peinado, diríamos que tiene algo de Jack Grealish). Es un atolondrado al que se le suelen enredar los pies pero que tiene la voluntad de ir a pelear cada pelota con los defensores rivales, como en el primer gol contra Lanús, donde apuró y anticipó a José Canale para luego hacer un eslalon en diagonal con una precisión atípica en él y soltársela justo a Brian Aguirre, que venía a la carrera, le pegó de primera desde afuera del área y la mandó a guardar. Golazo de la dupla Brian-May, los extremos que puso Larriera de arranque para la segunda presentación de Newell’s en la Copa de la Liga 2024.
El otro delantero titular fue Juan Ignacio Ramírez, que volvió a demostrar que, en un momento de crisis económica y escasez generalizada, fue una buena inversión poner plata en él, mejor que arriesgar en criptomonedas o en un fideicomiso financiero a través de colocación de deuda o participación de capital, ni hablar de un plazo fijo en pesos ahora que bajó la tasa de interés. A diferencia de la estafa piramidal que resultaron incorporaciones como las de Melano, Ordóñez, Reasco, Mosquera o Fabián Ángel, invertir en el Colo Ramírez es como haber comprado asado en julio y tenerlo ahora encanutado en el frezer.
Es un 9 que se mueve con mucha suficiencia por todo el frente de ataque, sabe cuándo hay que picar al vacío, cuándo aguantar la pelota y cuándo rebotar enseguida, atributos que se suponen básicos para cualquier futbolista profesional que pretenda ganarse la vida como centrodelantero pero que no venían siendo usuales en nuestro primer equipo. Lo que hace en el segundo gol no lo veíamos desde el retiro de Nacho Scocco. Y no me refiero a la definición (un latigazo impecable) sino a la sutileza previa de acompañar el movimiento de los defensores dentro del área hasta detenerse de imprevisto y retoceder un paso para poder recibir sin marcas el centro atrás. En realidad, la jugada completa fue una belleza, perfección nivel segundo gol de Argentina contra Francia en la final del mundial. El uruguayo Fernández recupera la pelota en tres cuartos de cancha y encara hacia adelante, se la pasa a Banega que toca a lo Messi para la proyección decidida de Armando Méndez, que a lo Alexis Mac Allister ve el movimiento de Ramírez y se la deja servida para que someta al arquero. Otro golazo.
Ever forever
Si en la primera fecha contra los satiagueños Banega nos había generado entusiasmo, en esta segunda contra Lanús le declaramos amor eterno. Hizo todo bien. El único dato para prestar atención es que no tiene reemplazo, De nuevo jugó 80 minutos y, cuando salió, ya no hubo quién pudiera manejar con criterio la pelota en el medio. Junto con él salió Franco Díaz y entraron Vangioni y Chiaverano, ninguno de ellos con las características para hacer el trabajo de Banega. Tampoco Cacciabue, que un rato antes había entrado por Pitbull Fernández. Por cierto, ya habría que empezar a hacer una vaquita para juntar los 3 millones de dólares que cuesta su pase así podemos ejecutar la opción de compra el 31 de diciembre, ¡jugó muy bien el uruguayo Fernández! Más si tenemos en cuenta que aceleró se debut por la desgracia que le tocó a Sotelo, que se rompió los ligamentos cruzados y va a estar afuera unos cuantos meses. Justo que la semana pasada decíamos que este año seguramente lo veríamos más seguido porque en el plantel ya no están Sforza, Montenegro, Esponda ni Portillo (qué golazo clavó en Talleres-Gimnasia, por favor), qué manera de quemarlo. Perdón David.
Una digresión
Me preocupa el horario de los partidos. Las dos primeras fechas nos tocó jugar de noche, el domingo que viene contra Belgrano también jugamos a las nueve y lo mismo contra Racing en la fecha 5 . Los partidos contra Unión en la 4 y Estudiantes en la 6 están los dos programados para las siete y cuarto, así que por más que empiecen con las últimas luces naturales, la mayor parte se va a desarrollar en horario nocturno, al igual que el amistoso contra el Inter Miami del 15 de febrero. Con el calor de locos que está haciendo, pareciera una buena noticia que nuestros jugadores no se expongan a los rayos ultravioleta del sol. Pero ojo, no sea cosa que acostumbren demasiado la vista y el ritmo circadiano a la luz artificial y que el reloj biológico se altere cuando les toque jugar de tarde la fecha 7. Los necesitamos en plenitud para ese fin de semana.