El peor equipo del torneo
#39 | Liga Profesional 2024, fecha 20: Perdimos con Unión sin ningún tipo de atenuantes. Somos una murga indescriptible.
Lo único que sostiene a Newell’s en primera división es la cantidad de equipos que participan del torneo. Y por suerte siguen agregando. Para el nivel general del fútbol argentino es una desgracia que haya treinta equipos pero para nosotros es la salvación: si hubiese veinte, como en cualquier liga decente, definitivamente no seríamos uno de ellos. Pasan los mánager, los jugadores, pasan refuerzos y de inferiores, los dirigentes y entrenadores, somos los peores.
No hay mucho más para agregar.
A los 7 minutos ya perdíamos 1 a 0 y era cantado que no lo íbamos a empatar. Unión nos sometió sin enforzarse demasiado, casi sin despeinarse. Prueba de ello es la estampa del delantero que metió el segundo gol, Nicolás Orsini: luego de una hora de partido, su peinado se mantenía inalterable, apenas si se sacudió un poco durante el festejo.
Es cierto que un par de minutos antes el arquero de Unión hizo la de Dibu Martínez contra Australia en el último minuto de los octavos de final del mundial y le tapó con firmeza un viandazo a Silvetti que podría haber sido la igualdad transitoria, pero fue una jugada aislada. Porque si bien Newell’s tiene mucho la pelota, después no sabe qué hacer con ella (intuyo que por eso los rivales se la dejan tener), se la pasan sin ton ni son hasta que alguno finalmente la pierde y nos agarran mal parados en el contragolpe. No falla.
“Nosotros no podemos pretender que Newell’s sea un equipo que se la pase tirándose de cabeza, marcando. Nuestro punto fuerte siempre fue el fútbol, el fútbol bien jugado. Y estamos en esa búsqueda, no lo encontramos… Pero nosotros no tenemos perder de vista que la única manera de salir de estos momentos no favorables es tratando de ser mejores en lo que mejor sabemos hacer, y que todavía no lo podemos lograr, que es jugar bien al fútbol”. Me encanta que Lunari en la conferencia de prensa posterior a la derrota haya hablado de las raíces históricas de Newell’s, de lo que él vivió como jugador de inferiores y de primera a fines de los 80 y comienzos de los 90, el problema es que eso desapareció hace mucho. De otro modo no podría ser titular Augusto Schott. Y no se trata de ensañarse con él, pobre, es apenas un señalamiento evidente: no sacamos un 4 como la gente hace por lo menos dos décadas y recurrimos a uno que Talleres viene prestando a diferentes equipos desde hace tres años.
Y si no somos capaces de formar un marcador de punta, mucho menos un 9. Entonces juega Juanchón García, un 9 cuyo promedio de gol en doce años de carrera es de 0.24. Algo así como un gol cada cuatro partidos. Es lo que hay.
Lo peor de todo es que vamos a seguir quemando juveniles: es imposible que Tomás Pérez, Pablo Altamirano o Valentino Acuña puedan hacer pie en un equipo que juega tan mal. Y encima ya se está hablando de que lo quieren vender a Mateo Silvetti para sanear las finanzas y tener la posbilidad de traer refuerzos para el próximo campeonato. Spolier: se irá por dos mangos y traeremos jugadores medio pelo que impedirán que se sigan fogueando los que vienen de abajo. El mismo loop que nos trajo hasta acá.
El once inicial de la fecha 20: Unión 2 - Newell’s 0
PD: Se complica mantener el entusiasmo para celebrar un nuevo aniversario del club. También, para seguir escribiendo cada semana sobre este presente agotador. Por eso lo escueto de esta reseña.